La Centella Asiática, el activo natural más utilizado por su efecto reductor

Gotu kola es el nombre de una pequeña planta originaria de la India, mejor conocida en occidente como centella asiática. No es por casualidad que esta sea una planta empleada desde hace miles de años por la medicina tradicional china, más bien se debe a sus distinguidas propiedades terapéuticas. Sin embargo, su uso se ha extendido más allá de lo curativo y ahora la centella asiática es el principio activo natural utilizado en diferentes formulaciones por su efecto reductor.

Las presentaciones en las que se puede administrar son variadas: cápsulas, infusiones, geles, lociones y cremas; tanto el consumo como aplicación tópica de productos que contengan centella asiática son efectivos y favorecedores para la salud, sobre todo si se trata de afecciones en la piel.

Esta planta es rica en elementos nutritivos como vitaminas, flavonoides, taninos, aceites esenciales, aminoácidos, mucílagos y saponinas; todos estos son componentes que contribuyen a la acción curativa de la centella asiática, pero cabe resaltar que los triterpenos como el ácido asiático y asiaticósido son los principales responsables de la mayoría de sus beneficios. 

¿Por qué es tan buena la centella asiática en la piel? 

Tiene una gran variedad de propiedades entre las que resalta su acción regeneradora y restauradora de la piel lesionada que lo logra a través de la síntesis de fibroblastos por lo que es un excelente cicatrizante. Por otra parte, estimula la producción de colágeno, esto conduce a la reafirmación de la piel y elimina la flacidez. Además, su contenido rico en flavonoides glucurónidos ejerce acción antioxidante y rejuvenecedora, previniendo los daños de los radicales libres en la piel. Pero lo que realmente se debe destacar es su importante acción reductora y anticelulítica. 

Activo natural más utilizado por su efecto reductor

La centella asiática es una de las mejores opciones naturales para lograr una silueta más esbelta. El efecto reductor de esta planta se debe principalmente a su acción sobre los vasos sanguíneos. Gracias a su contenido de ácido asiaticósido produce vasodilatación de los capilares en la zona tratada, esto produce mejoría de microcirculación sanguínea y linfática local. Así aumenta la oxigenación de los tejidos lo que promueve el metabolismo celular. También es capaz de ejercer un efecto venotónico por lo que fortalece las venas circundantes. Estos fenómenos en conjunto movilizan los líquidos y toxinas retenidos, promueven la destrucción de los depósitos de grasa acumulados. A la vez, facilitan su eliminación del organismo lo que finalmente produce el efecto reductor de medidas y anticelulítico natural. 

Para que sea efectiva y aprovechar al máximo su potencial reductor es necesario aplicarla de forma correcta. Es recomendable aplicar la crema o gel reductor que contiene centella asiática sobre la zona corporal a tratar y masajear con movimientos vigorosos y circulares durante 5 a 10 minutos. Este masaje va a garantizar que el producto penetre profundamente. Adem facilita la activación de la circulación sanguínea y ayuda a movilizar los depósitos de grasas a eliminar. Puede ser aplicado 1 a dos veces al día.